Mermelada de grosellas: 8 recetas
Las grosellas son una de las bayas más comunes. Los arbustos de esta planta, que no requieren ni demasiados cuidados ni demasiada atención, producen un gran número de frutos, que no sólo se utilizan como alimento independiente, sino que pueden convertirse en la base para elaborar compotas caseras e incluso mermeladas. Las características de sabor de la mermelada de grosellas superarán todas las expectativas y no dejarán indiferente ni al más exigente de los gourmets.
- Composición y calorías
- Qué es útil para la mermelada de grosellas
- Cómo elegir una grosella para mermelada
- Cómo cocinar mermelada de grosellas: Recetas
- Mermelada clásica de grosellas
- Mermelada de grosellas sin cocción
- Mermelada real
- Mermelada de grosellas con plátano
- Mermelada de grosellas esmeralda
- Mermelada de grosella y naranja
- Mermelada de grosellas con nueces
- Receta rápida
- Cómo guardar la mermelada
- Datos interesantes sobre la grosella espinosa
Composición y calorías
Las grosellas son valoradas no sólo por su sabor único, sino también por su composición saludable. Son ricas en nutrientes, lo que permite utilizar las grosellas y sus derivados como tratamiento y prevención de muchas enfermedades.
100 g de bayas frescas contienen bastantes vitaminas, entre ellas:
- 15 µg de vitamina A (1,7% de la ingesta diaria).
- 6 µg de vitamina B9 (1,5% de la ingesta diaria).
- 0,4 mg de vitamina E (2,5% de la ingesta diaria).
- 0,1 mg de vitamina B6 (6,2% de la ingesta diaria).
- 27,7 mg de ácido ascórbico (30,8% de la ingesta diaria).
- 0,3 mg de vitamina B5 (5,7% de la ingesta diaria).
- 0,3 mg de vitamina B3 (1,9% de la ingesta diaria).
Además de vitaminas, esta baya también contiene minerales. Por cada 100 g de grosellas hay:
- 25 mg de calcio (2,5% de la ingesta diaria).
- 0,6 µg de selenio (1,1% de la ingesta diaria).
- 0,3 mg de hierro (3,9% de la ingesta diaria).
- 0,1 mg de manganeso (6,3% de la ingesta diaria).
- 10 mg de magnesio (2,5% de la ingesta diaria).
- 0,1 mg de cobre (7,8% de la ingesta diaria).
- 27 mg de fósforo (3,9% de la ingesta diaria).
- 0,1 mg de zinc (1,1% de la ingesta diaria).
- 198 mg de potasio (4,2% de la ingesta diaria).
- 1mg de sodio (0,1% de la ingesta diaria).
Las peculiaridades de la cocción de la mermelada de grosellas permiten conservar la máxima cantidad de vitaminas y otras sustancias útiles que están presentes en la composición de las bayas frescas. Por ello, esta mermelada se considera no sólo deliciosa, sino también una golosina útil, que se utiliza no sólo para la prevención, sino también para el tratamiento de muchas enfermedades graves.
En cuanto al valor calórico de la mermelada de grosellas, esta cifra es bastante baja. Sólo 205 calorías por cada 100 g de este manjar permiten utilizarlo como alimento básico incluso cuando se hace una dieta para perder peso.
Para qué sirve la mermelada de grosellas
Gracias a su rica composición, la mermelada de grosellas puede considerarse uno de los productos más saludables. Los buenos efectos sobre el cuerpo humano han sido señalados no sólo por expertos en medicina tradicional, sino también por terapeutas cualificados. Ambos coinciden en que con el consumo regular de este manjar una persona puede librarse de muchos problemas:
- Estreñimiento. La grosella espinosa es un excelente laxante. Tiene un efecto suave y no es capaz de irritar los intestinos.
- Estancamiento de la bilis. La mermelada de grosellas se recomienda a menudo para estimular la excreción de la bilis.
- Edema. La capacidad de las bayas para eliminar el exceso de líquido acumulado en el cuerpo humano se mantiene incluso después de ser cocinadas. Por ello, la mermelada de grosella puede deshacerse de un edema menor.
- Hipertensión. La mermelada de grosellas reduce la presión arterial y, si se utiliza con regularidad, previene un aumento brusco de la misma.
- Aterosclerosis. Las sustancias que componen este manjar pueden tener un efecto beneficioso para una persona que sufre de aterosclerosis. Cuando se consume regularmente, se produce una mejora del bienestar general y se detiene la progresión de la enfermedad.
- Gastroenterocolitis. Los médicos aconsejan incluir la mermelada de grosella en la dieta de los pacientes que sufren gastroenterocolitis. Este manjar no sólo mejorará el bienestar general de la persona, sino que, en combinación con la medicación, acelerará el proceso de curación.
- Anemia. El hierro, que forma parte de la composición de las bayas, ayudará a elevar el nivel de hemoglobina en la sangre y a prevenir su disminución en el futuro.
Sin embargo, estas no son todas las propiedades beneficiosas de este manjar. Consumo regular de mermelada de grosella
- reduce el riesgo de enfermedades cardíacas;
- refuerza las paredes de los vasos sanguíneos;
- reduce el riesgo de tumores malignos;
- El estado general del cuerpo mejora;
- Las enfermedades causadas por trastornos del sistema nervioso central tienen menos probabilidades de desarrollarse;
- Las funciones de defensa del organismo mejoran;
- Los tejidos óseos y articulares se fortalecen;
- Se reduce el riesgo de caries, adelgazamiento del esmalte y otros problemas dentales;
- mejora el metabolismo;
- reduce el riesgo de anemia;
- El cuerpo está saturado de muchas vitaminas, lo que ayuda a prevenir el desarrollo de la avitaminosis.
Sobre la base de los hechos anteriores, podemos decir que la mermelada de grosellas no sólo tiene propiedades tónicas generales, sino también:
- refrescante;
- antiinflamatorio;
- colerético;
- diurético, y muchos otros.
Por supuesto, sólo la mermelada de grosellas preparada correctamente puede tener un efecto beneficioso para el cuerpo humano. Por lo tanto, antes de empezar a hacer este manjar, debe familiarizarse con todos los matices y peculiaridades, cuya ignorancia puede tener un impacto negativo no sólo en el sabor, sino también en las propiedades útiles del producto terminado.
Cómo elegir las grosellas para la mermelada
Antes de proceder a la preparación de la mermelada, es importante prestar atención al hecho de que no todas las grosellas son adecuadas para ello. Para que el sabor del postre terminado no defraude al hogar, elija sólo bayas maduras y firmes. Las grosellas poco maduras estropearán las características de sabor de la mermelada terminada, y las demasiado maduras perderán su forma durante el proceso de cocción, lo que afectará negativamente al aspecto del producto final.
Cuando compre bayas, preste atención a su calidad. Las grosellas espinosas que presenten signos de moho, deterioro o parásitos no son aptas para la mermelada. Estas bayas se consideran no aptas para el consumo y pueden causar una grave intoxicación alimentaria.
Cómo hacer mermelada de grosellas: recetas
Una vez compradas y recogidas las bayas, se plantea la cuestión de cómo cocinar la mermelada de grosellas. Hay muchas recetas para cocinar este manjar. Sin embargo, los más populares son estos:
Mermelada clásica de grosellas
Aunque esta receta es conocida por muchas amas de casa experimentadas, no se puede pasar por alto. A pesar de la simplicidad de la preparación y la falta de ingredientes adicionales, su sabor complacerá a todos los miembros de la familia, y la composición útil saturará el cuerpo con vitaminas, lo que es especialmente relevante en el período frío del invierno.
Sólo se necesitan tres ingredientes para hacer la clásica mermelada de grosellas:
- 500g de grosellas maduras.
- 500g de azúcar.
- Agua purificada.
La preparación de este manjar no requiere ninguna habilidad culinaria especial y consiste en los siguientes pasos:
- Antes de hacer la mermelada, prepare las bayas. Vierta todas las grosellas en un recipiente cualquiera (un barreño, una olla o un cuenco), vierta agua fría sobre ellas y aclárelas bien, teniendo cuidado de no dañar la integridad de las bayas.
- Enjuague las bayas y recójalas, eliminando las grosellas inmaduras o estropeadas. A continuación, corta los tallos y vuelve a enjuagarlos.
- Una vez lavadas las grosellas, se puede pasar al siguiente paso de cocción. Échalas en una cacerola profunda y vierte suficiente agua para cubrir las bayas. Poner una cacerola pequeña a fuego suave, llevar a ebullición, removiendo las bayas con una cuchara de madera. Esto ayudará a evitar que las bayas se peguen al fondo de la sartén, lo que a su vez tendrá un impacto negativo en el sabor del producto final.
- Después de la ebullición, verter la cantidad especificada de azúcar en la olla con las grosellas y llevar la mermelada a ebullición una vez más, recordando remover constantemente y quitar la espuma.
- Una vez que haya hervido, retire la mermelada del fuego y viértala en tarros de cristal previamente preparados. Los tarros para la mermelada no sólo deben lavarse a fondo, sino también esterilizarse. Esto ayudará a mantenerlo fresco durante varios años.
Cuando la mermelada se haya vertido en tarros, ciérrelos con tapas y déjela enfriar completamente.
Una vez que haya probado la mermelada basada en esta receta, no podrá rechazarla. Su intenso sabor y su apetitoso aroma seducirán a todos los miembros de la familia y se disfrutarán en todas las fiestas de té durante el invierno.
Mermelada de grosellas sin cocción
Las amas de casa a las que no les gusta pasar demasiado tiempo cocinando apreciarán sin duda esta receta. Si lo eliges, no tendrás que cocinar la mermelada durante demasiado tiempo y asegurarte de que no se pegue al fondo de la sartén. La principal ventaja de esta receta es que conserva la máxima cantidad de vitaminas, macro y micronutrientes que contienen las grosellas. Esto le ayudará a obtener el producto más saludable posible, sin gastar demasiado tiempo y esfuerzo.
Antes de empezar a cocinar, prepare los siguientes ingredientes:
- 1 kg de grosellas maduras.
- 1,3 kg de azúcar granulado.
- 3 naranjas medianas.
Etapas de preparación:
- Comience por preparar las grosellas. Retire las bayas que muestren signos de moho, podredumbre o infestación por parásitos, límpielas de restos y rabos y lávelas a fondo en agua corriente fría. Asegúrese de que ninguna baya verde acabe en la mermelada. La presencia de grandes cantidades de fruta inmadura perjudicará el sabor del plato terminado.
- Extiende las grosellas sobre una toalla limpia y deja que se sequen un poco. Mientras se secan las grosellas, preparar los cítricos. Lávelos bien bajo el agua corriente, eliminando todas las impurezas, y córtelos en cuñas.
- Tenga en cuenta que cuando prepare las naranjas, no las pele. Esto dará un sabor inusual y agradable a la mermelada terminada y la hará realmente única.
- Una vez que hayas preparado las grosellas y las naranjas, empieza a picarlas. Hágalo con una picadora de carne o una batidora doméstica. El resultado debe ser un puré.
- No mezclar las naranjas y las grosellas en la fase de picado.
- Mezclar la fruta y el puré de bayas en un bol adecuado al tamaño de la fruta y llenarlo con la cantidad de azúcar especificada. Remover la mezcla resultante con una cuchara de madera y dejarla en infusión durante 2-3 horas.
- Una vez transcurrido el tiempo especificado, la mermelada puede considerarse lista. Repartirlo en frascos limpios, cubrirlo con tapas herméticas y guardarlo en un lugar oscuro y fresco.
El sabor de este manjar será muy diferente al de su variante clásica. Sin embargo, no se puede decir que los cítricos estropeen el sabor. Las grosellas y las naranjas combinan a la perfección y crean un dúo sorprendente que conquistará hasta al más exigente de los gourmets.
Mermelada del Zar
Todas las amas de casa habrán oído hablar de la singularidad de esta receta. Tiene un aspecto atractivo, una consistencia espesa y un sabor exquisito e intenso. Pruébalo una vez y no podrás rechazarlo.
A pesar de su nombre, los ingredientes utilizados para hacer esta mermelada son sencillos. Para hacerla, necesitas:
- 1,5 kg de azúcar.
- 1 kg de grosellas.
- 3 ramitas de cerezo.
- 500 ml de agua purificada.
Con la cantidad de ingredientes mencionada, sólo se pueden hacer 1,5 litros de mermelada. Si quieres, puedes aumentar la cantidad. Si se duplica o triplica la cantidad de grosellas, azúcar, ramitas de cereza y agua, la cantidad del producto final aumentará.
Al preparar la mermelada real, debe observarse la siguiente secuencia de acciones:
- Preparar las grosellas lavándolas en un barreño con agua fría y recortando los rabos. No olvide retirar todas las bayas estropeadas, ya que su presencia estropeará el sabor de la mermelada.
- Cuando las grosellas se hayan lavado y se hayan secado un poco, se retiran las pepitas de cada baya. Cortar cada baya en rodajas y quitarle las semillas con un alfiler limpio o un alambre.
- Después de retirar las semillas, enjuague las grosellas una vez más en agua fría y purificada y póngalas en un recipiente adecuado a su cantidad.
- Deje las bayas por un tiempo y comience a preparar las hojas de cereza. Retíralos de las ramas y acláralos bien bajo el grifo.
- Poner las grosellas en una olla apta para hervir. Coloque las hojas de cereza encima y vierta la cantidad de agua indicada.
- Dejar en infusión toda la noche, cubierto con una tapa. Esto ayudará a evitar la entrada de polvo y otros residuos.
- Por la mañana, retire las hojas de cereza, vierta el agua de la olla en un recipiente aparte y haga un jarabe de azúcar con ella. Vierta la cantidad especificada de azúcar en el líquido, remuévalo bien y hiérvalo durante 5-7 minutos después de la ebullición.
- No se olvide de remover el jarabe continuamente mientras está hirviendo.
- Cuando el almíbar esté listo, viértelo sobre las grosellas y déjalo durante 3 horas. Durante este tiempo, las bayas estarán empapadas y listas para ser hervidas.
- Una vez transcurrido el tiempo indicado, se pone el tocho al fuego, se cuece a fuego lento durante unos 10-15 minutos y se deja hasta que se enfríe por completo.
- Repite el procedimiento 3 veces más.
- Tras el último hervor, verter la mermelada caliente en tarros y cerrarlos.
Mermelada de grosellas con plátano
La combinación de grosella y plátano puede parecer demasiado atrevida a algunas personas. Sin embargo, sólo las personas que nunca han probado este inusual manjar pueden pensar así. El delicado plátano combinado con las grosellas y las especias crean un sabor sorprendentemente delicado y a la vez brillante que gustará tanto a los adultos como a los niños.
Para hacer la mermelada se necesitan los siguientes ingredientes:
- 1 kg de grosellas.
- 1kg de azúcar (se puede reducir si se quiere).
- 2 plátanos grandes.
- 2 ramas de canela.
- 4 brotes de clavo de olor.
Prepare la delicada receta siguiendo estos pasos:
- Preparar las grosellas lavándolas bien en un bol con agua limpia, asegurándose de desechar las bayas estropeadas. Si el agua está demasiado sucia después del primer aclarado, escúrrela y repite el proceso.
- Después de aclararlas, cortar los tallos y retirar las grosellas inmaduras.
- Colocar las grosellas en un recipiente de tamaño adecuado y aplastarlas con una cuchara de madera.
- Reservar el puré de grosellas y preparar el plátano. Pele el plátano y luego córtelo en pequeños círculos con un cuchillo afilado.
- Cuando el plátano esté cortado, échalo a las grosellas, añade el azúcar según la receta y mezcla bien la mezcla.
- Cubrir la mezcla con una gasa o una toalla fina y limpia y dejarla durante 2-2,5 horas.
- Cuando haya transcurrido este tiempo, añada las especias a la mezcla de frutas y bayas, remuévala bien y póngala a cocer.
- Cuando la mermelada haya llegado a un buen hervor, cocínela a fuego lento durante otros 5-7 minutos y, a continuación, retire la canela y los clavos con una espumadera. Durante este tiempo, la mermelada adquirirá notas ligeras y picantes, lo que mejorará su sabor y aroma.
- Retirar la mermelada del fuego, verterla en tarros y cerrarla con una tapa esterilizada.
Se puede utilizar tanto para sándwiches dulces como para rellenar productos dulces de pastelería. Además, complementa las gachas matinales, los postres de cuajada y muchos otros platos dulces. Su sabor realza el gusto y el olor de los alimentos familiares y hace felices a todos los habitantes de la casa o a los invitados.
Mermelada de grosellas esmeralda
Esta inusual mermelada es enormemente popular, lo que se explica fácilmente no sólo por sus sorprendentes características de sabor, sino también por su increíble color esmeralda. El aspecto de la mermelada esmeralda es lo que hace que uno quiera probarla.
Para preparar la mermelada de grosellas esmeralda, prepare los siguientes ingredientes:
- 150 g de azúcar granulado.
- 350 g de grosellas maduras.
- 50 ml de agua purificada.
- 2 gotas de esencia de cítricos.
- Colorante alimentario ligeramente teñido.
Prepara la mermelada de esmeralda con una receta especial:
- Enjuagar bien las bayas bajo el agua corriente, eliminando el polvo y otras impurezas. Mientras se aclara, deseche cualquier fruta estropeada o inmadura. Estas bayas no deben ir a la mermelada.
- Una vez lavadas las grosellas, se vierten en una cacerola esmaltada de tamaño ligeramente superior a la cantidad de grosellas. Añadir el azúcar granulado y el agua a las bayas y ponerlas al fuego.
- Llevar la mermelada a ebullición a fuego medio. Cuando rompa a hervir bien, cocine a fuego lento durante otros 10 minutos.
- Algunas grosellas pueden reventar durante la cocción. No te preocupes, esto no afectará al sabor de la mermelada.
- Una vez transcurrido el tiempo indicado, añadir el colorante verde claro a la cazuela, remover bien y cocer a fuego lento la mezcla durante otros 2-3 minutos.
- Verter la mermelada en tarros sin enfriar y cerrar con una tapa.
Una vez enfriada, guarde la mermelada en un lugar oscuro, observando el régimen de temperatura. La exposición a altas temperaturas hará que se estropee, y simplemente habrá que tirarlo.
Mermelada de grosella y naranja
Esta receta de mermelada de grosellas con adición de naranja hará las delicias de los más exigentes. Las sutiles notas cítricas y el agradable aroma harán que el manjar sea exquisito e inusual, mientras que la ligera acidez dará un toque de frescura al producto final. Sin embargo, eso no es todo. El principal secreto de la popularidad de esta mermelada es la presencia de nueces en su composición. Es la nuez la que lo hace sabroso y le da un sabor único.
Para hacer la mermelada de esta receta, necesitará los siguientes ingredientes:
- 1 kg de grosellas.
- 1 kg de azúcar granulado.
- 2 naranjas grandes.
- 400g de nueces.
Prepare esta mermelada de grosellas en los siguientes pasos:
- Enjuagar las grosellas bajo el chorro de agua fría. Recorte el rabo de cada baya y lávelas de nuevo.
- No se olvide de inspeccionar cuidadosamente las grosellas. Las bayas que muestren signos de deterioro deben desecharse. Su presencia estropeará el sabor y la calidad del manjar terminado.
- Proceda a preparar las naranjas. Lávelos en agua limpia y separe la piel de cada cítrico.
- Rallar la corteza con un rallador fino y picar la pulpa como se quiera.
- Picar las nueces. Para ello, puede utilizar un rodillo o una pala.
- Una vez preparados todos los ingredientes, picar con una picadora de carne y mezclar bien.
- Añadir el azúcar a la mezcla, mezclar bien y poner a fuego medio. Llevar la mezcla a ebullición, removiendo constantemente con una cuchara de madera.
- Una vez que la mezcla esté en ebullición, cocine a fuego lento durante otros 2-3 minutos y luego retire del fuego. Durante este tiempo, las grosellas y las naranjas tendrán tiempo de soltar su jugo y el azúcar se habrá disuelto completamente.
La mermelada está lista. Viértalo en tarros preparados con antelación y ciérrelos con tapas.
La mermelada de esta receta puede utilizarse como plato independiente o como cobertura de productos horneados o postres cuajados hechos en casa.
Mermelada de grosellas con nueces
Esta receta de mermelada de grosellas puede llevar mucho tiempo de preparación. Sin embargo, una vez que lo haya probado, toda anfitriona se dará cuenta de que el esfuerzo ha merecido la pena.
Antes de proceder a la cocción, preparar:
- 0,5 kg de grosellas.
- 1 kg de azúcar.
- 300-350 g de nueces.
- 500ml de agua purificada.
- Una pequeña bayoneta.
Preparación:
- Retire los tallos de cada grosella, luego enjuáguelos bien en un recipiente con agua fría. Repita la operación si es necesario.
- Coloca las bayas limpias sobre una toalla o un trozo de tela que absorba bien la humedad y deja que se sequen durante un rato.
- Una vez que las grosellas se han secado, se procede a retirar las semillas. Cortar en cada baya con un cuchillo afilado y retirar suavemente las semillas. Puedes hacerlo con una clavija normal o con un pequeño cable.
- Reservar las grosellas y trabajar con las nueces. Pelar el grano de la cáscara y romper las nueces en trozos pequeños.
- El siguiente paso de cocción puede considerarse el más difícil, pero no debe saltarse. Colocar un trozo pequeño de nuez en cada una de las grosellas. Intente hacerlo con el mayor cuidado posible para no comprometer la integridad de las bayas.
- Una vez que las nueces están dentro de las grosellas, se procede a hacer el jarabe de azúcar. Mezclar el azúcar y el agua en las cantidades indicadas, remover bien y poner la mezcla en la olla. Llevar el almíbar a ebullición a fuego lento, acordándose de removerlo con una cuchara de madera. Cuando el almíbar esté hirviendo y el azúcar se haya disuelto completamente, retírelo del fuego.
- Poner las grosellas rellenas de nueces en un recipiente apto para la confitura y verter sobre ellas el jarabe de azúcar. Dejar en un lugar oscuro y fresco durante 12 horas. Puede estar en la nevera o en una despensa fresca.
- Una vez transcurrido el tiempo indicado, poner el cazo con la mermelada en la cocina, añadir el badjan y llevar la mermelada a ebullición a fuego medio.
- Cuando la mermelada rompa a hervir, retira los badianes y cuece a fuego lento durante otros 10-12 minutos.
- La mermelada de grosellas y nueces está lista. Sólo queda verterlo en tarros de medio litro esterilizados y cerrarlos con tapas.
Receta rápida
Es difícil encontrar un ama de casa que al menos una vez no haya querido reducir el tiempo de cocción al máximo. Si está a punto de cocinar mermelada de grosellas y de repente se da cuenta de que está experimentando un deseo similar en este momento, eche un vistazo a esta receta. Si decide cocinar la mermelada de grosellas de acuerdo con ella, podrá reducir al máximo el tiempo de cocción. En este caso, el resultado superará todas las expectativas.
Para cocinar mermelada de grosella en una receta rápida, tome los siguientes ingredientes:
- 600g de grosellas.
- 500 gramos de azúcar.
- 100 ml de agua purificada.
La preparación de la mermelada de grosellas consta de varios pasos:
- Prepare las grosellas quitándoles los tallos y enjuagándolas en agua limpia y fría. Utilizar un colador profundo para evitar aplastar las bayas.
- Colocar las grosellas en un bol de tamaño adecuado y espolvorear 250 g de azúcar.
- Colocar el fermento en la nevera durante 2-3 horas y dejarlo reposar un rato. Durante este tiempo, las grosellas escurrirán el jugo, en el que se disolverá la mayor parte del azúcar.
- Después de 2-3 horas, vierta el tocho en un recipiente preparado para hervir, añada la cantidad necesaria de agua a las bayas y póngalo a fuego lento.
- Llevar la mermelada a ebullición, sin aumentar el fuego, y añadir la cantidad restante de azúcar. Remover bien las bayas sin dañarlas.
- Hervir la mezcla durante 5 minutos y retirar del fuego.
La mermelada de grosellas está lista. Lo único que hay que hacer es verterlo en tarros y cerrar las tapas.
La mermelada de grosellas también puede consumirse inmediatamente después de su elaboración. Será un magnífico regalo para el té de la noche o de la mañana y hará las delicias de todos los habitantes de la casa con su exquisito sabor y su delicado aroma.
Normas de conservación de la mermelada
Si cocinas mucha mermelada de grosella, debes saber cómo almacenarla correctamente. Para que el sabor y las propiedades útiles del manjar no cambien, hay que seguir unas sencillas reglas:
- Control de la temperatura. La temperatura de la sala donde se almacena la mermelada no debe superar los 20 grados centígrados. El incumplimiento de esta norma hará que se agrien las golosinas. Tenga en cuenta también que las temperaturas demasiado bajas pueden tener un impacto negativo en la calidad de la mermelada. Si la temperatura del aire se mantiene por debajo de los 5 grados centígrados, la mermelada puede agriarse. En algunos casos, no sólo cambia la consistencia del producto terminado, sino también su aroma e incluso su sabor, lo que indica que no debe consumirse.
- Falta de luz. La luz solar directa puede hacer que la mermelada se estropee. Por eso se recomienda almacenar la mermelada en una bodega o despensa. La luz rara vez penetra en estos lugares.
- El barrio correcto. Al guardar la mermelada abierta, hay que limitar su contacto con los olores penetrantes y desagradables. Por ejemplo, la mermelada que se ha mantenido junto al pescado durante varios días será simplemente imposible de comer.
La mermelada que se ha almacenado cumpliendo todas las recomendaciones se considera apta para el consumo en 24 meses. Recuerde que las altas temperaturas o la exposición a la luz solar directa pueden reducir la vida útil del manjar varias veces y hacer que se estropee rápidamente. Si nota un olor desagradable, un sabor poco característico u otros signos de deterioro del producto, absténgase de consumirlo. El consumo de dicha mermelada puede provocar una intoxicación intestinal, que requerirá tratamiento ambulatorio.
Datos útiles sobre la grosella espinosa
La grosella espinosa está considerada como una de las bayas más populares. Hay arbustos de grosellas en una de cada dos parcelas del jardín, si no en todas. Incluso sin cuidados especiales, la planta produce anualmente un gran número de bayas, que a su vez se utilizan ampliamente no sólo en la cocina, sino también en la medicina tradicional. Y aunque todas las amas de casa experimentadas conocen las propiedades y usos útiles de las grosellas, sólo unos pocos conocen estos hechos:
- Los ingleses llaman a la grosella espinosa "gooseberry", los bielorrusos la llaman "agrest", y en el territorio de la Alemania moderna el nombre de esta planta suena como "espina de Cristo".
- La grosella espinosa está estrechamente relacionada con las grosellas.
- En la antigüedad, la grosella espinosa sólo era conocida por los europeos. Era en sus territorios donde la planta crecía de forma silvestre, y en grandes cantidades.
- La grosella no se cultivó hasta el siglo XIII. Esto lo hicieron los franceses.
- En Francia, las grosellas no sólo se utilizaban en platos dulces. A menudo se encuentran en sopas y salsas.
- Holanda y Alemania no conocieron las grosellas hasta el siglo XVII.
- La grosella espinosa es el líder entre las bayas en términos de contenido calórico. Su valor calórico es de 44 calorías por cada 100 gramos.
- Las grosellas espinosas inmaduras pueden proteger el cuerpo humano de los efectos de la radiación.
Si aún no ha tenido la oportunidad de probar la mermelada de grosellas, no hay ni un minuto que perder. Elija una de las recetas propuestas, proceda a cocinar el manjar y disfrute de su inolvidable sabor. Créame: una vez que lo pruebe, no podrá rechazar este producto único.
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